Fabricado de los árboles que desecha la industria del látex en Tailandia y sus pinturas son naturales a base de soya.

Es ideal para el desarrollo del Juego Simbólico en la Primera Infancia, desde los 2 a los 8 años. Es un material seguro que guiará a niñas y niños en una intuitiva exploración creativa, afectiva y social, junto con entrenar sus destrezas motoras finas y gruesas.

El juego simbólico lleva a l@s niñ@s a crear nuevos mundos a partir de la representación de sus propias observaciones y reflexiones del mundo real-cotidiano, ayudándolos a desarrollar un montón de habilidades.

Este tipo de juego es necesario e infalible para todos los géneros, limitar el la experiencia de un niño solo a un determinado tipo de juguetes, acotará sus experiencias, su visión del mundo y de lo que conoce. Si se le permite jugar a “realizar tareas cotidianas”, desde pequeño desarrollará estas herramientas y sabrá expresar los conceptos relacionados a ella.